Tesla retiró los modelos Y, S, 3 y X producidos entre el 5 de octubre de 2012 y el 7 de diciembre de este año, para reparar un sistema defectuoso que debe garantizar que los conductores presten atención mientras utilizan el piloto automático.

El vehículo robado cuesta más de 500,000 dólares.

El más reciente caso es el robo de un Toyota Supra valorado en más de 60,000 dólares.

"Finalmente lo tengo en mi garaje. A algunos les parecerá poco, pero macho alfa que se respete anda en un caballo como este", bromeó Alexander Pupo Casas.

"Ese carro es del gobierno, lo compraron con el dinero que le roban al pueblo y después dicen que son los dueños de mipymes quienes los compran", dijo un habanero.

Es un lujoso BMW M50i, que nuevos se venden por más de 80 mil dólares.

El adolescente le tocó la ventana del carro para pedirle un favor.

Imágenes compartidas en redes sociales permitieron apreciar el estado en el que quedaron ambos vehículos tras el impacto, con daños considerables en sus carrocerías.

Los bólidos de lujo que participaron en el evento causaron la admiración de las decenas de personas que se congregaron en la playa El Salado.

Se trata de la apertura de la primera y única residencia Aston Martin en el mundo.

Atraídos por esta competición, miles de turistas han llegado a la ciudad con la intención de ser testigos de las carreras y del ambiente festivo que acompaña al emocionante evento que concluye mañana domingo.

Es un Rolls-Royce Ghost 2012 que cuesta entre 350,000 y 400,000 dólares. Su incorporación es parte de una nueva estrategia para atraer oficiales a unirse a la Policía.

Nancy Echavarría compró el Mercedes-Benz hace dos meses. "Trabajar duro para tener un carro bonito, le iba a dar ese carro a mi niño que iba a graduarse".

"Ya tengo mi primero Mercedes para pasear, el Nissan del 2021 es para trabajar", aclaró.

Es una camioneta 450 negra de edición limitada de 2023, fue robada en la avenida 134 y la calle 260 del suroeste. El dueño ofrece una recompensa.

Las autoridades señalaron que la joven estaba bajo los efectos de una sustancia conocida como “cocaína rosa” o tusi, una mezcla de ketamina utilizada comúnmente en fiestas, y que había huido de la escena del accidente.