Vacíos de contenido y sumidos en una derrota moral e intelectual, los organizadores de eventos propagandísticos del régimen andan de capa caída, incapaces de crear nuevas consignas, aburridos de las viejas, y resignados a despertar el “fervor revolucionario”…

El exespía manifestó que “las bombas de hoy son más sutiles y solapadas, y están sobre todo en el mundo de las redes sociales”.

El módulo incluía unas íntimas viejas, una soga, una pequeña cantidad de algodón y una corbata, artículos que el denunciante describió como "de lento movimiento", sacados de los almacenes nacionales.

El régimen totalitario teme a los cubanos que malviven en barriadas humildes y abandonadas a su suerte, en donde florecen las actividades delictivas y el descontento de la población.

El gobierno cubano lanza "barrio debates antimperialistas" para desviar la atención de la crisis económica, culpando al embargo de EE. UU. Pese al intento por revitalizar los CDR, la participación es baja.

El régimen pretende celebrar unos 1,400 actos de este tipo hasta julio.

Mientras gran parte de Cuba sufre largos apagones, en Holguín sí hubo electricidad para que el exespía Gerardo Hernández realizara un "barrio debate antimperialista".

El exespía elogia la cría de peces en casa como solución a la falta de pescado en Cuba. El régimen promueve esas iniciativas individuales en medio del colapso del sistema productivo estatal.

Mientras el pueblo sufre apagones y escasez, Gerardo Hernández, coordinador de los CDR, comparte un video "a ritmo de clave" para celebrar el Primero de Mayo y los 65 años de la organización que dirige.

La organización admite dificultades para encontrar dirigentes dispuestos a sostener una estructura cada vez más cuestionada por los propios vecinos.

Autoridades advirtieron que los delitos asociados al vandalismo tienen un “amplio marco sancionador” y que podrían ser tipificados como crímenes contra la seguridad del Estado, con penas que oscilan entre 7 y 30 años de privación de libertad, e incluso contemplan…

Mientras millones de cubanos sufren apagones diarios, Gerardo Hernández, jefe de los CDR, relata cómo los vive en casa con dulces y juegos familiares.

Saturnino Cintra, delegado de Siboney en Santiago de Cuba, murió de un infarto durante una reunión. Reconocido por su dedicación, dejó un legado de lucha por mejoras en el transporte local.

Gerardo Hernández busca revitalizar los CDR en Cuba. A pocas semanas del 65 aniversario, lanza un programa para resaltar su utilidad y combatir el desgaste y la apatía social hacia la organización.

El régimen recurrió a los CDR para reforzar la vigilancia barrial en medio de una crisis energética sin solución y crecientes protestas contra el modelo socialista.

Gerardo Hernández publica un video de fiesta de los CDR en medio de la crisis en Cuba, generando indignación en redes por considerarse una burla.

Gerardo Hernández intenta promover festividades de los CDR desde Ciego de Ávila, pero enfrenta críticas en redes por la desconexión entre la propaganda y la crisis diaria en Cuba.

Mientras Cuba atraviesa una de sus peores crisis, los CDR celebran 65 años premiando a niños, cocinando caldosa y vendiendo productos estatales en actos cargados de propaganda y obediencia.

Gerardo Hernández, coordinador de los CDR, promocionó la entrega de repelentes donados por la empresa serbia Panagro. La acción generó críticas en redes por su simbolismo ante la crisis sanitaria en Cuba.