Esta teoría de conspiración se basa en varios puntos cuestionables, como el supuesto parecido físico entre Trudeau y el dictador cubano.

Aunque Trudeau describió el encuentro como una “excelente conversación”, no obtuvo garantías de que Trump se retractará de su amenaza de imponer un arancel del 25% a todos los productos provenientes de Canadá.

La posible dimisión del primer ministro y el ascenso del partido conservador genera incertidumbre en las relaciones bilaterales y podría afectar el turismo hacia Cuba, ya que Canadá es su principal emisor de turistas.

En rueda de prensa organizada en la ciudad de Ottawa, Trudeau reflexionó sobre su legado y explicó las razones detrás de su decisión.

"Si Canadá se uniera a EE.UU. no habría aranceles, los impuestos bajarían y estarían totalmente seguros ante la amenaza de los barcos rusos y chinos. ¡Qué gran nación seríamos!".

Canadá destinará 1,300 millones de dólares para reforzar la frontera, combatirá el tráfico de fentanilo y creará una fuerza conjunta con EE.UU. Las tarifas arancelarias quedarán suspendidas por 30 días.

En su emotivo discurso, agradeció a los canadienses, destacó sus logros y desafíos enfrentados, como tensiones con Trump y problemas económicos.