El hotel se estrena en medio de una crisis económica y con muy baja ocupación del turismo en Cuba.

Algunos cubanos especulan que se trata de un hecho premeditado para ocultar faltantes.

"Acaso creen que con esta situación can a atraer turistas, cuando la opinión de los que allí estaban en su mayoría era que nunca más regresarían a Cuba", afirmó un turista.

“Seguimos creciendo en Cuba, con muchas ganas. Da gusto el trabajo que hemos hecho con las autoridades cubanas para el desarrollo del turismo en el país. Así que seguimos ahí”, afirmó Gabriel Escarrer.

Meliá inaugurará nuevas instalaciones hoteleras en la Isla, así como asegura mejoras infraestructurales en otras.

Este hotel fue inaugurado el 28 de diciembre de 1959. Tiene un bloque central de siete niveles, más de 140 habitaciones, una piscina, el bar Escambray, y un cabaret conocido como Guanaroca.

La relación de Gabriel Escarrer con el régimen cubano suscita dudas sobre su "apuesta por Cuba" y pone nuevamente el foco en la pregunta de quiénes son los verdaderos beneficiados del modelo de negocios del empresario español.

Meliá celebra 35 años en Cuba, enfrentando críticas por su opaca relación con el régimen, uso de mano de obra mal pagada y sospechas de corrupción, en un contexto de crisis económica.

Meliá Hotels enfrenta desafíos en Cuba, con una caída del 20,8 % en ingresos por habitación y disminución del 12 % en vuelos. Problemas de suministro y baja demanda agravan la situación sin señales de mejora.

La cadena hotelera española señala una reducción del 12 % en las operaciones aéreas y una fuerte caída en tarifas y ocupación hotelera en la isla.