Luego de que el régimen bajara el peso y el precio del pan normado, los cubanos criticaron en las redes sociales la medida del gobierno.

Las "soluciones" evidencian la crisis que afecta a la provincia en el traslado del pan normado

Mientras que el ministerio de la Industria Alimenticia explicaba recientemente a los cubanos que la reducción del tamaño y gramaje del pan era la única forma en que se podía garantizar el producto normado a la población, IMSA desplegaba en su stand sus harinas…

Para el cura católico Leandro NaunHung, compartir alimentos es una manera de llevar alegría en medio de la crisis que afecta a tantas familias.

Las inspecciones a las panaderías no detienen el malestar popular ante la reducción del tamaño del pan.

Las bandejas de masa de pan fueron trasladas de una panadería y llevadas a otra cercana para su cocción debido a la falta de electricidad.

El pan que distribuye el régimen a través de las bodegas es ligeramente más grande que una taza de café

El gobierno redujo el pan de la cuota a 60 gramos por falta de materias primas. Dice que quiere volver al peso original pese al alto costo de importación de trigo.

Pan de La Habana redefine la panadería en Cuba con su oferta gourmet de panes artesanales de alta calidad. A pesar de sus altos precios, la demanda sigue creciendo, desafiando la crisis de harina.

El pan normado en Santiago de Cuba enfrenta críticas por su mala calidad, ligada a fallas eléctricas y escasez de harina. A pesar de promesas de mejora, los problemas persisten.

La falta de harina en Matanzas paraliza la producción de pan en casi toda la provincia. Autoridades admiten el fracaso en la gestión, sin ofrecer solución inmediata, agravando la crisis alimentaria.

La producción de pan de la canasta básica en Matanzas se suspende por falta de harina, afectando a todos los municipios.

La escasez de harina en Cuba ha paralizado la producción de pan en provincias como Matanzas y Santiago de Cuba, afectando la canasta básica. Solo el molino de Cienfuegos está operando, pero no cubre toda la demanda.

Un barco con 24 mil toneladas de trigo llegó a La Habana para el pan de la canasta básica, en medio de una crisis de harina que afecta a Cuba.

La escasez de harina en Santiago de Cuba ha disparado el precio del pan hasta 50 pesos la bola, generando indignación por la especulación y afectando a los más vulnerables, como niños y pensionados.

"Hoy lo dieron doble porque el día que no había corriente no hicieron pan"

El incidente muestra la desesperación por recursos básicos, con actos extremos en busca de alimentos.

La escasez extrema de alimentos en Cuba refleja la profunda crisis del régimen, que niega derechos básicos y libertad. La falta de pan y sal simboliza el colapso de un sistema ineficiente y represivo.

Todo depende no solo de la materia prima, sino también del combustible, imprescindible para transportar los productos, lo que complica aún más la situación.

Autoridades en Matanzas reconocieron que el pan huele "a cucaracha", pero aseguran que no se debe a contaminación con insectos, sino a otro factor.