El vandalismo y la falta de mantenimiento han dañado la estructura, creada para el esparcimiento de las personas, y que mostraba signos de destrucción desde 2016.

Una empresa estatal laboraba en el derribo del alero de un edificio que está en peligro de derrumbe donde viven tres familias, y se cayó un fragmento del inmueble contiguo.

Lugares emblemáticos como la Plaza Vieja, la calle Obispo, la Plaza de la Catedral, la calle Mercaderes o la Plaza San Francisco de Asís, estaban casi vacías el sábado por la mañana.

El derrumbe ocurrió poco después de las ocho de la noche de este jueves.

Vecinos de la zona afirman que la víctima fue descuartizada y que le faltaban miembros.

Aunque no hubo víctimas ni heridos, los afectados perdieron sus pertenencias.

Kiara estaba desaparecida y fue erróneamente confundida con otra joven que fue asesinada y hallada en un latón de basura. Ambas son de La Habana Vieja.

"Mi vida puede peligrar porque no estoy hablando solamente contra el régimen, sino contra la delincuencia que vende droga sin ningún tipo de castigo".

"Los jefes de sector conocen a cada opositor, saben dónde vive cada delincuente potencial, cada sancionado. Entonces, ¿por qué no conocen dónde vive cada traficante, cada distribuidor, cada vendedor, cada productor, cada consumidor?".

Con su grito, el vecino indicó al joven que era mejor entregarse a la policía y asumir la pena de cárcel. “Jaba” es el nombre que recibe la bolsa de alimentos que reciben los reclusos en Cuba de manos de sus familiares.

Apagones, derrumbes, basura, escasez de alimentos, desabastecimiento de agua, deficiencias en el sistema de salud y en otros servicios públicos reflejan el deterioro y descontento creciente en la capital cubana.

Vecinos de La Habana Vieja capturaron a un ladrón tras arrebatarle el celular a una turista belga de 73 años. Mientras el régimen elogia la "unidad popular", la crisis y la inseguridad aumentan.