La inestabilidad en el abastecimiento de combustible ha dejado temporalmente fuera de circulación a la mayoría de estos vehículos.

El túnel se cerró en el sentido Cabaña-Habana.

El descarrilamiento provocó que se interrumpiera la circulación de los trenes por la Línea Central.

El barco acababa de salir de una reparación.

"Permanecen muchas personas en la estación La Coubre, por un tiempo prolongado", dijo el ministro de Transporte.

No se reportaron heridos.

Según el ministro, se trabajó en el restablecimiento de la línea tratando de no causar nuevos daños a la locomotora y los tres coches afectados.

La denunciante argumentó que, al utilizar un vehículo estatal y gasolina proporcionada por el gobierno, el chofer no debería imponer tarifas abusivas.

La empresa Taxis Cuba evaluará el servicio según la duración de las baterías de los triciclos para determinar su viabilidad y sostenibilidad.

Las causas que motivaron el retraso son diversas: desde errores en la web hasta la rectificación de las inscripciones hechas por los interesados.

“Rompieron la puerta de atrás. El hecho ocurrió en la calle Mayía Rodríguez, municipio de 10 de Octubre, resultando un herido. Hasta el momento, se encuentra un detenido en la estación policial de Aguilera”, reportó un internauta.

El periodista independiente Yosmany Mayeta Labrada compartió en Facebook un video del suceso, en el que no se reportaron heridos.

Con el transporte público en mínimos históricos, el gobierno de Miguel Díaz-Canel prioriza el acondicionamiento de kilómetros de carreteras que conectan a los hoteles que controla el opaco conglomerado militar de GAESA.

El ómnibus circulaba con las puertas abiertas.

La situación tuvo lugar en medio de la grave crisis de transporte existente en la isla.

La Unión de Ferrocarriles de Cuba (UFC) canceló la circulación del tren local que cubría la ruta Los Arabos–Matanzas, el cual se descarriló el pasado 27 de septiembre, por “no disponer de más coches”.

Varios ómnibus rotos tensan la situación del transporte en La Habana

Algunas terminales tendrán dos salidas en la mañana, y dos en la tarde. Otras limitarán sus viajes a uno en cada horario.

Hay afectaciones en el servicio de trenes, ómnibus y transportación marítima.

Actualmente en explotación, tras décadas de abandono y falta de mantenimiento, los elevados son prácticamente una ruina, con las columnas y toda la estructura de acero corroída por el salitre, y por la falta de pinturas y tratamientos adecuados para su preservación.